El masaje descontracturante está diseñado para abordar el dolor de espalda generado por contracturas en la zona escapular, y es una modalidad específica dentro de la categoría de masajes terapéuticos. La evaluación y el diagnóstico individualizado por parte del terapeuta son esenciales, ya que los tipos de dolor y malestar varían entre pacientes, lo que exige enfoques personalizados.

Contrario a la creencia popular, el masaje descontracturante es solo una de las diversas especialidades dentro de los masajes terapéuticos. Sus técnicas se centran en aliviar contracturas localizadas principalmente en la espalda alta (zona cervical) y los hombros. Este masaje busca deshacer las contracturas acumuladas en estas áreas, mejorando así la estabilidad y reduciendo el dolor del paciente de manera efectiva.

¿Por qué se producen las contracturas?

Las contracturas musculares pueden tener múltiples causas, incluyendo malas posturas, enfermedades musculares o esqueléticas, estrés, tensión y exceso de trabajo.

Para combatir las contracturas musculares, es crucial ajustar los procedimientos de masaje descontracturante según la intensidad y cronicidad del dolor. No es lo mismo tratar una contractura reciente que una que ha persistido durante meses o años.

La elección de las técnicas descontracturantes también dependerá de la especialización del terapeuta, ya sea en contracturas leves o crónicas.

Para combatir una contractura muscular de manera profesional, es fundamental realizar una evaluación previa para determinar la técnica adecuada. Cada persona es única, y las técnicas de masaje deben adaptarse al umbral del dolor individual.

Es esencial evitar causar más dolor al paciente durante el tratamiento. El masaje descontracturante se centra en aliviar contracturas específicas, y su efectividad depende de tratar precisamente una contractura, no otros tipos de dolor como tirones, fatigas, rigidez muscular o lesiones.

No debe confundirse el masaje descontracturante con otros masajes para el alivio del dolor, ya que los procedimientos son significativamente diferentes. El especialista es quien tiene la última palabra para garantizar el mejor resultado en el tratamiento de masajes.

¿Qué evaluaremos en este diagnóstico previo?

1 Profundidad de la contractura

La profundidad de la contractura dependerá de la estructura muscular del paciente, y de la zona donde se aloja esta contractura, como bien podría estar tan superficial como «a flor de piel» como podría estar tan profunda que se requieran fuerzas de presión mucho más profundas.

La profundidad de la técnica descontracturante también tendrá una medición en centímetros cuadrados y mientras más profunda se encuentre la contractura, mayor será la profundidad de la técnica en los procedimientos

2 Tiempo y frecuencia de la molestia provocada por la contractura

Los beneficios del masaje descontracturante también dependen del tiempo que lleva alojado en el cuerpo y su frecuencia, porque tal cual como ocurre en la medicina convencional que tiene sus pacientes leves y/o crónicos, cuando hablamos del masaje como método terapéutico, ocurre algo muy similar. Nunca será lo mismo un paciente que dice sentir molestias por contractura desde hace una semana, a otro que dice padecer los síntomas desde ya hace 1 o 3 años. Los procedimientos cambian, la medicina del profesional cambia, incluso el especialista también cambia si se trata problemas leves como aquel profesional que trata problemas crónicos.

El profesional especialista en casos crónicos será siempre la mejor alternativa

Generalmente, una persona que lleva con problemas de contracturas por más de un año, es un paciente que requiere de tratamientos descontracturantes y donde un masaje jamás sería suficiente para poder mitigar al 99% los síntomas.

Los beneficios de los masajes descontracturantes dependen del perfil del paciente y de las características de su dolor, así como también del especialista que dice tratar síntomas «leves» o crónicos».

3 Tamaño de la contractura.

Se realizará un diagnóstico táctil para corroborar si la contractura abarca zonas o microzonas, o si ha llegado a otras zonas como cuello, hombros, zona lumbar, etc.

4 Umbral del dolor

¿Es usted delicado o resistente al dolor?

Este detalle, que al parecer no tuviera mayor relevancia, es también parte importante en los tratamientos para dolores. Los cuerpos cambian y así también su resistencia a las fuerzas aplicadas a un cuerpo que siente que vive y que sufre al tacto las malas prácticas efectuadas. No es profesional en ningún caso, provocar tortura y/o al contrario, hacer presiones tan suaves que no alcanzan a contrarrestar los malestares.

5 Tiempo del dolor

¿Cuánto tiempo lleva usted padeciendo el malestar por contractura?

6 Tipo de técnica

Adaptarse con las técnicas precisas a todas estas características de la contractura, entregará garantía de satisfacción en el resultado final.

La característica de la contractura, hará la característica de las técnicas y/o procedimientos en el masaje de alivio.

Para garantizar un resultado mejorado, también tendremos presente el umbral del dolor en cada persona y así no tenga usted que sufrir innecesariamente en la terapia

Para que esto jamás suceda es necesario saber con anterioridad si el umbral del dolor alto o bajo, así de esta manera nos vamos adaptando de apoco a la tolerancia del paciente.